MISCELÁNEO: El Viagra

El Viagra es un fármaco destinado al tratamiento de la disfunción eréctil en hombres, que es la imposibilidad de mantener una erección peneal suficiente para lograr sexo satisfactorio. Esta enfermedad tiene una prevalencia aproximada del 10 % en la población general, porcentaje que se duplica en hipertensos, se triplica en diabéticos y se cuadriplica en enfermedades cardiovasculares.

En condiciones normales, es decir, con estimulación sexual, restaura la función eréctil deteriorada mediante el aumento del flujo sanguíneo al pene. El citrato de sildenafil (principio activo) es un medicamento que, tanto en las etapas de investigación como en el uso clínico, ha demostrado una alta eficacia (la respuesta en los pacientes es notable) con pocos efectos colaterales. Se destaca que es un medicamento para una condición médica y psicológica específica: la disfunción eréctil, aunque actualmente hay personas que lo usan para mejorar su rendimiento sexual. También está siendo estudiado su uso en mujeres. Por supuesto para que Viagra sea efectivo es necesaria la estimulación sexual.

Mecanismo de acción

Por efecto de la excitación sexual se libera, de unas neuronas de los cuerpos cavernosos y de las células del interior de las arterias (células endoteliales), una sustancia gaseosa que se llama óxido nítrico. Esta sustancia promueve una serie de cambios que resultan (mediados por una sustancia llamada guanosin-monofosfato cíclico -GMPc-) en una relajación del músculo liso cavernoso, que permiten la vasodilatación de las arterias del pene y en la subsiguiente erección. Pero el GMPc es degradada por una enzima, llamada fosfodiesterasa tipo 5 (PDE 5), responsable de la pérdida de la erección. El sildenafil es un potente inhibidor, altamente selectivo, de la PDE 5, lo que se opone a la degradación de la GMPc, impidiendo así la pérdida prematura de la erección, actuando entonces a nivel periférico. Este fármaco no tiene un efecto relajante directo sobre los cuerpos cavernosos humanos aislados, pero aumenta potentemente el efecto relajante del óxido nítrico en este tejido.

Indicaciones

Los comprimidos de Viagra están destinados a la administración por vía oral. Su uso en adultos equivale a una dosis de 50 mg tomados según sea necesario, aproximadamente 1 hora antes de la actividad sexual. Basados en la eficacia y tolerancia, la dosis puede aumentarse a 100 mg o reducirse a 25 mg. La dosis máxima recomendada es de 100 mg. La frecuencia posológica máxima recomendada es 1 vez al día.

Antes de iniciar cualquier tratamiento de la disfunción eréctil, el médico debería considerar el estado cardiovascular de sus pacientes, ya que existe algún riesgo cardíaco asociado con la actividad sexual. El Viagra tiene propiedades vasodilatadoras, resultando en una disminución leve y transitoria de la presión arterial. Antes de prescribir el medicamento, el médico debería considerar cuidadosamente si sus pacientes con ciertas patologías subyacentes podrían verse afectados de forma adversa por tales efectos vasodilatadores, especialmente combinados con la actividad sexual. Los pacientes con una mayor susceptibilidad a vasodilatadores incluyen aquellos con obstrucción del flujo ventricular izquierdo (por ejemplo: estenosis aórtica, miocardiopatía hipertrófica obstructiva) o aquellos con el infrecuente síndrome de atrofia sistémica múltiple que se caracteriza por una insuficiencia grave del control autónomo de la presión sanguínea. Si bien causa una disminución leve y transitoria en la presión arterial , en la mayoría de los casos, no se traduce en efectos clínicos.

Uso Recreacional

Los años han pasado, el Viagra se ha constituído en uno de los fármacos más vendidos en el mundo, y ahora se puede apreciar que muchos hombres lo toman para aumentar su rendimiento, su potencia, el monto del placer, aunque no padezcan de ninguna disfunción.

El período refractario es el tiempo que tendrá que pasar -que no es igual para todas las personas- para conseguir una nueva erección luego de un orgasmo. En esto se diferencia de la mujer que puede tener orgasmos múltiples. Casi todos los hombres jóvenes tienen 1 ó 2 orgasmos por encuentro, quedando muchas veces satisfechos con el primero, y que si bien es cierto que en algunas situaciones se pueden tener más, esto no significa un criterio de normalidad o anormalidad.

Factores de Riesgo

Fumar: uno de los efectos locales del tabaco es alterar la síntesis del oxido nítrico, principal sustancia para relajar el músculo del pene y favorecer la erección.

Alcohol: Varios estudios han demostrado que frente a un estímulo erótico el paciente siente más (sensación de excitación) y obtiene menos (rigidez peneana) luego de consumir alcohol.

Sedentarismo: El efecto favorecedor de la circulación coronaria sería debido a que la actividad física disminuye las grasas en la sangre, aumenta el HDL (“colesterol bueno”) favoreciendo una mayor fluidez del flujo sanguíneo.