11 mayo 2006

EUTANASIA: Que En Paz Descanse - Requiescant in Pace

¿Existe un derecho a morir? Según de donde se le mire, este hecho adquiere distintas definiciones: “homicidio piadoso”, “muerte sin sufrimiento físico”, “muerte en estado de gracia”, “lucha contra el sufrimiento a cualquier precio”, o visto romanamente, “muerte digna”… el “derecho” del cual estamos hablando es el “derecho” del paciente (persona) a decidir la forma y el momento de su muerte, acción que busca como único fin el librar a la persona de su sufrimiento, de una agonía que padece como resultado de alguna enfermedad grave. El hecho al cual se debe el llegar a pensar en esta decisión se basa en el carácter “incurable” de su mal.

Para entendernos, eutanasia significaría entonces el hecho de provocar una muerte fácil y sin dolores a un paciente que está próximo a morir por causa de una enfermedad terminal. La pregunta es: ¿y dónde queda el derecho a la vida? ¿quiénes somos como para tener el derecho de quitarnos la vida? Este cuestionamiento se basa en la autonomía del hombre, desconociendo ser regido por un ente superior o Dios.

El hombre siempre, a lo largo de la historia, ha querido explicar la muerte como un paso hacia otros mundos mejores y eternos, considerando este tiempo como temporal y de preparación para ese viaje. Ello ha hecho que metafóricamente haya tratado de hacer un culto a la vida y a la perfección de la misma, descartando con actitudes de discriminación a los deformes, enfermos mentales, y a los de razas no deseadas, entonces, es posible que la eutanasia sea solamente una manifestación más de esta actitud que con el correr de los siglos ha merecido la crítica y condena de las diferentes civilizaciones, pero que no por ello, ha impedido la búsqueda por medio de ella de una perfección que nunca ha logrado.

Ahora, del otro lado de la moneda: ¿Se debe siempre prolongar la vida por cualquier medio? De poder, se puede. Hasta qué límite, es el dilema ético. ¿Será válido practicar la “distanasia” (prolongar la vida ilícitamente)? ¿Hasta qué punto rige el “Que En Paz Descanse”? Tal vez podría llegarse a “término medio” – es decir – comparar riesgos v/s beneficios, efectividad de tratamientos, posibilidad de sobrevida, entre otros, pero es díficil dirimir aquello.

Kant decía que la vida no vale por sí misma, sino en función de un proyecto de vida ligado con una libertad y una autonomía, y ésta se justifica si permite la base material para una vida digna. En la eutanasia, ¿se estará acabando con una “vida indigna”? ¿o tal vez se estarán optimizando los recursos humanos y de los otros?

Naciones Unidas plantea que ante la inminencia de una muerte inevitable, a pesar de los medios empleados, es lícito en conciencia tomar la decisión de renunciar a tratamientos que procurarían únicamente una prolongación precaria y penosa de la existencia, sin interrumpir sin embargo las curas normales debidas al enfermo en casos similares. Por lo tanto, lo que se considera inútil o inservible, no es la vida del paciente, sino los medios que se han utilizado sobre él, los cuales, en este caso, lamentablemente, no han servido para curarle ni para mantener su vida sin sufrimientos graves.

Para efectos prácticos: para todo hay clasificación. Aquí una rápida síntesis: la eutanasia activa es el acto en que la vida del enfermo es terminada por la acción de otra persona que busca justamente este resultado, p.ej., administrando una inyección letal; la eutanasia inactiva causa el mismo efecto, pero producto de una omisión de los tratamientos que mantienen con vida al paciente. El se diferencia de la eutanasia en que es el mismo enfermo el que realiza el acto final, pero un tercero le ha facilitado las cosas para que así sea. La suicidio asistido se diferencia de la eutanasia en que es el mismo enfermo el que realiza el acto final, pero un tercero le ha facilitado las cosas para que así sea; la eutanasia lenitiva se da cuando la muerte es producto de los efectos secundarios de algún tratamiento contra el dolor. En el polo opuesto se encuentra la distanasia, que consiste en mantener con vida a un enfermo con medidas exageradas, costosas, desproporcionadas y a veces hasta peligrosas, y como medida para contrarrestar está la adistanasia, que consiste en retirar los tratamientos excesivos, lo que trae la muerte natural de la persona.

Tu opinión vale!

6 comentarios:

  1. El tema es delicado sobretodo para las personas que son creyentes.
    Tengo una opinión bastante fría al respecto. Un tío murió de cáncer al páncreas y sufrió muchísimo, era incurable. La familia estaba muy clara que él no iba a sobrevivir... y agonizó durante días, con mucho dolor, en un estado en el que ya no podía demostrar su sufrimiento hablando, sus ojos lloraban y sus manos aún tenían fuerzas para apretar... es fuerte el tema. Mi tío fue consumiéndose, quedó en estado de cadáver... en este caso yo hubiese aplicado eutanasia, porque tuvo que sufrir mucho antes de morir.

    Por otro lado, el hombre siempre ha buscado refugio por el miedo a la muerte en el pensamiento de que después de esta vida, hay otra... el ser superior que supuestamente lo protege no podría perdonar que él decidiera por sí mismo quitarse la vida... el regalo concebido...

    Es complicado hablar de eutanasia cuando hay muchos sentimientos involucrados. En todo caso, siempre he pensado que cada uno es dueño de su vida, y que cada uno debería decidir qué hacer con ella... el lado sentimental aflora, cuando uno ve que hay gente que a uno lo quiere y que sufriría mucho la pérdida... pero insisto en que cada uno debería tener el poder de decidirlo.

    Un beso, chau
    Lore

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  2. Es jodido el tema..es algo de principios.
    Personalmente creo en el derecho a morir ante situaciones extremas de la misma forma como respeto y creo en el derecho a seguir viviendo.

    Creo que ante padecimientos extremos, deberiamos poder tomar decisiones propias, sin que nadie se opongo.

    Es un tema muy personal.

    Un abrazo.-

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  3. Cada uno (se supone) es dueño de su vida.
    Creo que en situaciones extremadamente graves y que ya no tengan remedio, la posibilidad de dejar que el paciente pueda decidir sobre seguir o no viviendo es válida.
    Creo que frente a la muerte, los seres humanos somos un poco egoístas y queremos que nuestros seres queridos estén junto a nosotros para siempre. No se puede, y si están sufriendo, por qué no darles alivio?,
    Saludos!

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  4. Es una decisión personal del enfermo o de sus parientes directos!

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  5. En mi opinión, si la situación es extrema y no existe vuelta atrás, el enfermo puede decidir no seguir un tratamiento, ya que su situación terminal, por muchos remedios que tome, no se va a recuperar.

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  6. lo ideal seria morir durante el sueño pero hay ocasiones en que no es asi
    creo que por un lado si yo supiera que voy a morir y me gustaria morir de una vez aparte soy donante y no me gustaria que otras vidas se perdieran por esperar que yo agonize lentamente

    y por otro lado la hospitalizacion es tan cara yo creo que optaria por la eutanacia activa o por suicidio asistido
    pero la idea es que nadie vaya preso por mi decicion
    ahh me complico todo este tema

    pero debemos aprender a ver las cosas de otro modo
    mi vieja es de esas que les da pavor el sufrimiento corporal y me dijo que cuando estuviera muy mal y ella lo pidiera la desconectara de las maquinas
    no quiere vivir postrada en una cama
    yo por mi parte mientras no se legalize nada y si ella no escribe una orden bajo notario no hare nada

    y eso me voy a tomar desayuno

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