INTRO El Virus de la Inmunodeficiencia Humana (VIH) es un virus perteneciente a la familia de los retroviridae; Los retrovirus están constituidos por un ácido ribonucleico (ARN) que debe copiarse en ácido desoxirribonucleico (ADN) bicatenario para poderse integrar en el núcleo de la célula huésped; por lo tanto su material genético es ARN en la partícula viral y ADN cuando se encuentran en la célula que infectan. El proceso de conversión de ARN en ADN es una característica principal de los retrovirus que se lleva a cabo mediante acciones enzimáticas secuenciales; la propiedad de replicarse a través de la transcripción inversa les da su nombre, pero esta propiedad la comparten otros virus animales, como los que producen las hepatitis B, y vegetales.
El VIH se adquiere básicamente por tres vías: transmisión sexual, vía parenteral (uso de drogas endovenosas, transfusiones sanguíneas contaminadas, etc.), y la vía vertical (madre a hijo).
A medida que la infección avanza pueden aparecer los siguientes síntomas: diarrea persistente, pérdida de peso inexplicable, falta de apetito, fatiga constante, ganglios inflamados, fiebre recurrente, infecciones micóticas (las más frecuente, candidiasis). Estos síntomas pueden desarrollarse a las pocas semanas o meses de haber adquirido el virus, denominándose fase inicial. En la fase crónica existe una duración variable estimada en varios años y en ella persiste la proliferación viral, aunque a bajo nivel. Los pacientes pueder ser asintomáticos, con o sin adenopatías, cifra baja de plaquetas y mínimos trastornos neurológicos. Aunque existen amplias variaciones individuales, se estima que en 10 años el 50% de los adultos y el 80% de los niños habrán evolucionado a estadios más avanzados, aunque la progresión de la enfermedad puede verse influida por numerosos factores.
Existe un paso siguiente, denominado fase final; se caracteriza por un aumento de la replicación del VIH y coincide clínicamente con una profunda alteración del estado general del paciente, aparición de graves infecciones oportunistas, ciertas neoplasias y alteraciones neurológicas, de modo quer podemos decir que el infectado por VIH tiene Síndrome de Inmunodeficiencia Adquirida (SIDA). El pronóstico es variable en cuanto a supervivencia. La edad, el mecanismo de contagio, la forma de presentación parecen influir en la supervivencia. Es importante en esta etapa recibir atención médica y psicológica adecuada, para controlar por una parte el estado inmunológico del individuo, ya sea con controles sanguíneos, semiológicos, nutricionales; como también su psiquis.
TRATAMIENTO
El tratamiento con fármacos ha favorecido la prolongación de la supervivencia en el tiempo: Antes de ellos la supervivencia no era superior al 30-50% a los 2 años y menor del 10-20% a los 4 años. Reportes nacionales indican que el uso de un fármaco de origen mapuche, el Kintral, busca ser un fármaco complementario de la medicina tradicional. Pacientes con VIH presentan por lo general un cuadro de depresión, por lo cual se encuentran más vulnerables e incluso presentan un aumento en su carga viral; bajo esta premisa, el medicamento actuaría en el sistema inmunológico, pero también en el psicoemocional. Está elaborado en base a muérdago; es un arbusto al cual se le atribuyen propiedades medicinales que apuntan principalmente a solucionar males relacionados con el corazón.
PREVENCIÓN
El uso de preservativo en relaciones sexuales reduce en un 99% el riesgo de contraer alguna E.T.S. Considera como riesgoso tener sexo con desconocidos, relaciones homosexuales, o sexo por cavidades que naturalmente no están destinados a ello: vía anal, u oral, ya que la fricción produce microheridas que pueden permitir el paso del virus.
Si bien el VIH se ha encontrado en diferentes líquidos corporales como saliva, lágrimas, orina, su presencia, por su baja cantidad, no ha permitido constatar que permitan la transmisión del virus del SIDA por lo que los besos, vasos, cucharas, agua, ropa interior, etc. no suponen una fuente de transmisión del VIH.
Del mismo modo tampoco se transmite por picaduras de mosquitos ni de otros insectos y tampoco es transmitido por los animales domésticos ya que no son portadores del virus, es decir, el ciclo del virus no se puede llevar a cabo en células que no sean las humanas. Tampoco da SIDA el donar sangre; asimismo, compartir lugares comunes con un portador del VIH.
Fuera del organismo el VIH es un virus poco resistente, por lo que se puede inactivar con relativa facilidad en el medio ambiente. Los desinfectantes frente al VIH se comportan mejor en un medio líquido que en un medio seco. Entre ellos podemos considerar agua oxigenada, detergentes, alcohol al 70%, calor por encima de 60 ºC, sin embargo, es resistente al frio y a los rayos UV, gamma y X.