Se dice (ojo, no lo afirmo) que existirían dos tipos de machos: los que seríamos infieles y los que vuelan. Ahora, con unos copetes en el cuerpo muchos afirman que les gustaría acostarse con otra mina que no sea su pareja por el simple hecho de sentir esos aires “matadores”, de “conquista”, sentir otro olor, tocar otra piel, golear en otra cancha....bueno, así como los autos, el partido del fin de semana, este tema es habitual en los típicos Club de Toby...típico cuando estás con tus amigotes en un bar o pub, y el lugar se llena de escotes y de guapas, warras y cuanto subtipo se conoce...
Ahora, cuáles son los motivos / causales por los cuales nuestra raza al final o en la mayoría de los casos se inhibe, desiste, reprime, se arrepiente, etc...vamos por parte: primero, un simple análisis costo/beneficio es la opción que más nos ronda en la mente. Que vale la posibilidad de una canita al aire, un polvito, etc., versus el costo de perder algún tipo de relación (llámese pololeo, noviazgo, convivencia, matrimonio) y sus respectivas consecuencias: volver a la soledad, cocinar para uno (si es que sabemos cocinar), arrendar algo, en fin. Otro plus lo constituye la facha, para poder reinsertarnos en el mercado de los solteros y tener alguna chance.
Otro argumento de esta cosa llamada ¿infidelidad? Tiene que ver con la logística que hay detrás del cuento. Todo empieza por el dónde. Recuerda, siempre, pero siempre alguien te va a ver (a menos que te vayas a tirar a la Luna o a Marte). Ahora, si la niña de turno no es soltera o separada, hay que pensar en un lugar neutral...habría que ser muy care raja como para ir a la casa cuando no hay nadie...entonces ahí emerge la sagrada institución del cacheteo: EL M O T E L...con sus sábanas de dudosa pulcritud y limpieza (cómo sabes si sólo le pegaron una sacudida y que pase la siguiente pareja???); otra opción, mucho menos rentable por supuesto, arrendar un depto... pero quién puede mantener dos arriendos??? ...descartado... otra, el auto, es como volver a épocas pasadas, pero el riesgo es alto, porque nos arriesgamos a que nos asalten, o a que nos pillen y nos echen al agua.
Otro cuestionamiento es el cómo. Se necesita todo un proceso de ingeniería para mantener las apariencias...”trabajar” toda la red de supuestos “informantes”... otro problema es el celular y el eterno dilema: ¿lo apago, lo dejo en silencio o contesto care raja?. Ahora, el pago: ¿en efectivo? ...puede ser... ¿tarjeta? no, la cuenta puede caer en otras manos...Otro: ¿a qué hora? Difícil decisión...el delatante: olor “post-delito” (se puede neutralizar este item con el concepto “ducha”, pero eso sí, con jabón y shampoo que no sean distintos a los de casa). Si nos preguntan qué fue de nuestra vida, o nuestro día, hay q tener un “cuento” o “chiva” preparada....
Son muchas cosas, muy complicado. Más easy es seguir soñando, compartir las fantasías con los amigotes, y por último, ir cada mucho tiempo a uno de estos lugares donde bailan señoritas (¿taples se llaman?) que sea carelli como para sentirse mujeriego, aunque sea mirando....
Ahora, cuáles son los motivos / causales por los cuales nuestra raza al final o en la mayoría de los casos se inhibe, desiste, reprime, se arrepiente, etc...vamos por parte: primero, un simple análisis costo/beneficio es la opción que más nos ronda en la mente. Que vale la posibilidad de una canita al aire, un polvito, etc., versus el costo de perder algún tipo de relación (llámese pololeo, noviazgo, convivencia, matrimonio) y sus respectivas consecuencias: volver a la soledad, cocinar para uno (si es que sabemos cocinar), arrendar algo, en fin. Otro plus lo constituye la facha, para poder reinsertarnos en el mercado de los solteros y tener alguna chance.
Otro argumento de esta cosa llamada ¿infidelidad? Tiene que ver con la logística que hay detrás del cuento. Todo empieza por el dónde. Recuerda, siempre, pero siempre alguien te va a ver (a menos que te vayas a tirar a la Luna o a Marte). Ahora, si la niña de turno no es soltera o separada, hay que pensar en un lugar neutral...habría que ser muy care raja como para ir a la casa cuando no hay nadie...entonces ahí emerge la sagrada institución del cacheteo: EL M O T E L...con sus sábanas de dudosa pulcritud y limpieza (cómo sabes si sólo le pegaron una sacudida y que pase la siguiente pareja???); otra opción, mucho menos rentable por supuesto, arrendar un depto... pero quién puede mantener dos arriendos??? ...descartado... otra, el auto, es como volver a épocas pasadas, pero el riesgo es alto, porque nos arriesgamos a que nos asalten, o a que nos pillen y nos echen al agua.
Otro cuestionamiento es el cómo. Se necesita todo un proceso de ingeniería para mantener las apariencias...”trabajar” toda la red de supuestos “informantes”... otro problema es el celular y el eterno dilema: ¿lo apago, lo dejo en silencio o contesto care raja?. Ahora, el pago: ¿en efectivo? ...puede ser... ¿tarjeta? no, la cuenta puede caer en otras manos...Otro: ¿a qué hora? Difícil decisión...el delatante: olor “post-delito” (se puede neutralizar este item con el concepto “ducha”, pero eso sí, con jabón y shampoo que no sean distintos a los de casa). Si nos preguntan qué fue de nuestra vida, o nuestro día, hay q tener un “cuento” o “chiva” preparada....
Son muchas cosas, muy complicado. Más easy es seguir soñando, compartir las fantasías con los amigotes, y por último, ir cada mucho tiempo a uno de estos lugares donde bailan señoritas (¿taples se llaman?) que sea carelli como para sentirse mujeriego, aunque sea mirando....
PD: Mi PC murió, no arranca...si alguien tiene algún dato "piola" pa llevarlo a arreglar, que me mande una mail...